De continuar la tendencia mantenida durante los primeros 10 meses del pasado año, la balanza comercial de la piel española cerrará el 2018 con toda seguridad con subidas en las ventas al exterior de pieles semicurtidas y curtidas. Entre enero y octubre del pasado año, también destacó el descenso de las exportaciones de pieles en bruto, así como la caída de las importaciones de pieles semicurtidas.
Según datos de la Dirección General de Aduanas, entre enero y octubre de 2018 respecto al mismo período de 2017, las exportaciones de pieles en bruto cayeron un 17,58 por ciento (31,3 millones de euros menos). En el caso opuesto, las ventas al exterior de piel semicurtida aumentaron un 7,53 por ciento (4,8 millones de euros más); así como las exportaciones de pieles curtidas, que detectaron una subida del 2,31 por ciento (7,2 millones de euros más).
En cuanto a las importaciones de piel, durante los 10 primeros meses del pasado año con respecto al mismo período de 2017, las compras en el extranjero de pieles en bruto bajaron un 4,57 por ciento (3 millones de euros menos) y las de pieles semicurtidas lo hicieron un 10,12 por ciento (12,1 millones de euros menos). Por el contrario, la importación de pieles curtidas crecieron un 1,08 por ciento (3 millones de euros más).
En consecuencia, la balanza comercial de la piel arrojó entre enero y octubre de 2018 un desequilibrio a favor de las exportaciones españolas de más de 82,8 millones de euros.
