
A mediados de verano se pueso en marcha oficialmente el proyecto europeo Green Leather Industry for Environment, financiado por la Comisión Europea (CE) en el ámbito del programa LIFE.
En el proyecto colaboran cinco empresas italianas que trabajan en distintas fases de la producción de cueros: dos curtidurías (Dani y Gruppo Mastrotto), un proveedor de productos químicos (Ikem), una empresa especializada en biotecnología y maquinaria agropecuaria (Ilsa) y una compañía que da servicios de depuración del agua (Acque del Chiampo). Entre estas cinco empresas tratarán de encontrar nuevos modos de reducir el consumo de agua durante el proceso de curtición de pieles, estudiarán cómo reutilizar y dar mayor valor a los subproductos derivados de la curtición y evaluarán los costes y beneficios de las nuevas tecnologías emergentes.
Busca entre otros objetivos nuevos modos de reducir el consumo de agua durante el proceso de curtición de pieles
Para alcanzar estos objetivos, el proyecto Green Leather Industry for Environment durará tres años y contará con un presupuesto de 2,3 millones de euros, de los cuales cerca de la mitad está financiada por la CE.
Residuos de la curtición
El proyecto Green Leather Industry for Environment tiene como objetivo proponer soluciones a una de las mayores preocupaciones de la industria actual de la curtición: el impacto medioambiental de esta actividad. La curtición de pieles produce una gran cantidad de subproductos de desecho. Gran parte de ella se destina a la producción de fertilizantes y bioestimulantes; sin embargo, otra parte importante no se reutiliza o recicla. Por otra parte, las aguas residuales resultantes del proceso de curtición también son un problema para su tratamiento, ya que contienen un alto porcentaje de productos químicos peligrosos.