El proyecto SuperBiodiesel acaba de recibir el sello Key Innovator del programa Innovation Radar de la Comisión Europea. Esta investigación que estudia cómo producir biodiesel y bioestimulantes a partir de grasas de vacuno, un subproducto animal que hasta ahora era considerado un residuo. La participación del centro tecnológico del calzado Inescop en este proyecto ha sido clave, ya que ha desarrollado un bioproceso sostenible de bajo impacto ambiental para transformar la fracción proteica del residuo tratado en un bioestimulante.
En Europa se gestionan anualmente diecisiete millones de toneladas de subproductos animales. Esto significa un problema tanto para el clima como para el medioambiente, ya que pueden contener sustancias nocivas. Una alternativa viable y prometedora para estos residuos es la propuesta por SuperBiodisel, el cual trabaja para transformar la grasa animal en biodiésel y las proteínas descartadas, en bioestimulante.
Una vez separada la fracción grasa para la obtención del biodiesel, «aplicamos un proceso enzimático para la obtención de bioestimulantes o fertilizantes orgánicos a partir de la fracción proteica obtenida como subproducto del proceso anterior», explica Henoc Pérez, experto en valorización de Inescop.
Hasta la fecha, la proteína recuperada de los residuos de cuero sin curtir se han utilizado como agentes recurtientes o como texturizantes para la industria alimentaria, pero no se habían obtenido bioestimulantes. Los procesos químicos convencionales utilizados para la recuperación de proteína son procesos con un gran impacto medioambiental. Pero, gracias al bioproceso que ha desarrollado Inescop, «podemos obtener bioestimulantes, basados en aminoácidos libres, mediante un proceso sostenible con un bajo impacto ambiental», afirma Pérez.
Bioestimulantes para plantas
Los bioestimulantes desarrollados en el proyecto han sido validados como mejoradores del crecimiento de las plantas. Estas mejoras en el crecimiento están relacionadas con el contenido en aminoácidos libres de los bioestimulantes desarrollados que simplifican el ciclo de fijación de nitrógeno de las plantas. Se estima que los bioestimulantes obtenidos en el marco del proyecto incrementan el índice de crecimiento de algunas plantas entre un 35 y un 40 %.
Tras varios años de investigaciones y de pruebas en laboratorio, los socios del proyecto trabajan en dos plantas pilotos a escala industrial, una para la elaboración de biodiesel y otra para la elaboración de bioestimulantes.
Consorcio del proyecto
El consorcio del proyecto Superbiodiesel «Producción de biodiesel avanzado a partir de residuos animales mediante tecnologías supercríticas» está coordinado por AIJU, y en él participan empresas como Cepsa y Organovac e institutos tecnológicos como Inescop, el Instituto Madrileño de Estudios Avanzados (Imdea), el Instituto de Tecnología Química (ITQ-CSIC) y la Universidad de Murcia.
