La compañía brasileña de biotecnología Ilsa Brasil está a punto de alcanzar la cifra de las 300.000 toneladas de residuos de cuero transformadas en fertilizantes desde que comenzó a operar en Brasil en 2009. Gracias a la innovadora tecnología de Ilsa Brasil, los desechos inútiles derivados del curtido de pieles pueden convertirse en un nuevo producto, muy beneficioso para el medioambiente. Este gran número de toneladas reconvertidas es un ejemplo de cómo la industria del cuero en Brasil está apostando en los últimos años por la economía circular y las soluciones ecosostenibles.
El trabajo de Ilsa consiste en convertir los desechos de cuero wet-blue en fertilizantes mediante un proceso de hidrólisis térmica, transformándolo en un tipo de gelatina rica en nutrientes orgánicos y carbono.
El trabajo de Ilsa consiste en convertir los desechos de cuero wet-blue en fertilizantes mediante un proceso de hidrólisis térmica, transformándolo en un tipo de gelatina rica en nutrientes orgánicos y carbono. Después de un proceso de secado, se obtiene el fertilizante. Este producto puede utilizarse para enriquecer aproximadamente 500.000 hectáreas de cultivos. Estos fertilizantes tienen características únicas, como un alto contenido de nitrógeno orgánico y carbono, importante tanto para las plantas como para la calidad del suelo, y son un ejemplo de cómo la tecnología, la innovación y las buenas prácticas pueden conducir a una producción y consumo de cuero sostenible y transparente.
Ilsa es una empresa fundada en 1956 en Italia. En Brasil, comenzó a operar en 2009, consolidándose en el mercado latinoamericano. En la actualidad, Ilsa está presente en 51 países de todo el mundo.
