Alrededor de 60.000 personas, vecinos de Òdena, Igualada, Santa Margarida de Montbui y Vilanova del Camí (Barcelona), se han visto confinadas en sus casas durante toda la mañana del pasado 12 de febrero, a causa de una explosión en la fábrica de productos químicos para la curtición Simar. La explosión hirió de levedad a tres operarios que manipulaban sustancias químicas y produjo una nube tóxica que obligó a los habitantes de estas localidades barcelonesas a refugiarse en sus hogares por el riesgo de irritaciones y problemas respiratorios.
Simar es una empresa dedicada a la fabricación de productos químicos con cerca de 50 años de experiencia. Actualmente es un importante proveedor para la industria española de la curtición, gracias a su catálogo de productos que abarca desde la fase de remojo, pelambre y desengrase al acabado de las pieles curtidas. La empresa cuenta en Igualada con unas instalaciones de 45.000 metros cuadrados, que incluyen sus propios laboratorios de investigación.