La balanza comercial de la piel en España de 2015 mantiene en agosto las mismas tendencias que lleva arrastrando durante todo el año. Las exportaciones caen y las importaciones de cuero suben, dando como resultado una balanza comercial negativa. Compramos más de lo que vendemos y lo que compramos son pieles trabajadas.
Las exportaciones de piel en bruto durante los dos primeros cuatrimestres del año bajaron un 16,1 por ciento, aproximadamente 28,5 millones de euros. Las ventas de piel semicurtida apenas han notado cambios con respecto al mismo período de 2014, con un aumento del 0,75 por ciento, 400.000 euros; mientras que las exportaciones de cuero descendieron un 5,3 por ciento, algo más de 14 millones de euros.
Las compras de pieles en bruto y semicurtido disminuyeron un 3,8 y un 14,1 por ciento respectivamente. La primera bajó 2,2 millones de euros y la segunda más de 15,5 millones de euros. Sin embargo, las compras de piel curtida y acabada aumentaron un 12,6 por ciento, casi 37 millones de euros.
La bajada de las exportaciones y el importante aumento de compras de piel curtida y acabada han cambiado completamente la balanza comercial en un año. Mientras que en 2014, en agosto, la balanza tenía un saldo positivo de 39 millones de euros a favor de las exportaciones; en el mismo mes de este año la balanza presenta un saldo negativo de 21,8 millones.
